Dos afirmaciones y una necesidad

DOS AFIRMACIONES Y UNA NECESIDAD

Me las tomo.Con el talón de Aquiles dolorido,a medio
hartar de concurrir al Bautismo de mis dudas a diario,
recordando que no hay mujer a la que quiera o vaya
a desear como la que ahora está parada ante mi asedio;
mordiendo la puerta y las verdades que en el armario
escondí en momentos que me ocultaba del mundo que estalla.

Me estoy yendo.Juro que no me queda otra,no hay chance de
elegir o revelarme ante un destino que abotona mi camisa,
hoy el calendario me deja mudo y tan deseoso de tirotearlo,
hasta el punto que soy un mendigo pidiéndose un poco de fe
a si mismo,desbordado por decisiones escritas con tiza
en un pizarrón que no olvida ni permite censurarlo.

Sin rojos ni verdes.Sin colores.Sin anillos de arcoiris.
Sin muchas más preguntas que mi viaje será largo y abrumador.
Sin manojos de las llamas del infierno en la palma de mi mano.
Sin empezar a prenderle velas a la divinidad de Osiris
ni ponerle lentes de contacto a los ojos de un futuro mejor;
sin el mínimo mensaje que nada aporta cuando todo es en vano.

No quiero que unos minutos se transformen en ojeras disimuladas
con preguntas,no quiero rendirle cuentas a tu divina ternura,
que empiece a tartamudear el sudor frío de mi corazón maleducado,
ni que mis penas se propaguen por estar desprevenida la población.
Nada de nada,ni el peor de los peores compartiendo tu frazada,
ni el coronel al que el pueblo le obedece temiendo a su dictadura,
soy éste que aquí ves viviendo como puede y quizá hasta equivocado
por irme sin definir tus labios por el hecho de no encontrar comparación.

Me cuesta caminar con los tacos altos del remordimiento pisándome,
aunque en el fondo ambos sabemos que sin duda era lo más justo,
ponme un trago de cicuta pero rebájalo con el azúcar de tu mirada,
préparame la soga o la hoguera solo si después sigues amándome;
enférmame de todos los defectos que te encuentres que con gusto
yo me engripo,resfrío y me exorcizo si me salvas el día de mañana.

Es tarde a pesar de que el reloj tan poderoso cuando quiere
dice en su luminosidad que son las seis y que el sol descansa,
llevo una lágrima de regalo que mutará en bofetadas en un rato,
cuando solo conmigo mismo escuche a Sabina que me hiere
diciéndome que "cuando aprieta el frío" una estufa no alcanza
a cubrir la nieve y el pronóstico miente en los datos.

Reencarnar con dignidad sería factible si creyera que es cierto,
correr no sirve porque en algún momento deberé seguro parar,
pues el aire que sobraba cuando tu luna y la mía eran siamesas
vuelve a escaparse transformando el respirar en un tormento;
sentarme en un trono que no es mío podría resultar,
me queda esperar que termine todo ésto que comienza.

No quiero que unos minutos se transformen en ojeras disimuladas
con preguntas,no quiero rendirle cuentas a tu divina ternura,
que empiece a tartamudear el sudor frío de mi corazón maleducado,
ni que mis penas se propaguen por estar desprevenida la población.
Nada de nada,ni el peor de los peores compartiendo tu frazada,
ni el coronel al que el pueblo le obedece temiendo a su dictadura,
soy éste que aquí ves viviendo como puede y quizá hasta equivocado
por irme sin definir tus labios por el hecho de no encontrar comparación.

Chau,princesa,está llegando el colectivo que me lleva hasta Misiones,
es cerrar ese negocio y si Diós quiere mañana a ésta hora volveré
con los papeles arreglados,puedo dar por sentado esas dos afirmaciones,
por el hecho de quedar contigo mi corazón pese a irme,y él no es el
punto pues podría subsitir sin latidos,el tema es que acá estás quedando
vos y ahí sí que te aseguro que así no puedo continuar más de un día...


Mariano