Ser feliz

SER FELIZ

Yo nunca lo hubiera creído, pero es así...

En un rincón de mis venas está tu alba,

en la torre de tus dudas mis fantasmas...

Y el tiempo no importa si se es feliz,

de este tablero sin peones tu amor me salva,

relaciones con fórmulas son sutiles miasmas.

Yo siempre dije que era de idiotas enamorarse,

hoy juro que es de imbéciles aquel pensamiento,

ahora que la noche tiembla en nuestros corazones

incorporada en el acto de dos bocas que al besarse

despedazan la quietud en lentos movimientos,

con la pausa de la prisa de acertar las decisiones.

Ser feliz es un cruel milagro en estos días,

discúlpenme colegas por tremenda alevosía,

no hay llagas, tormentas, clavos ni cruces,

tan solo campanadas; te amo sin maquillajes,

Afrodita de esta playa arenosa y del oleaje,

al punto que las estrellas salen a admirar tus luces.

Ser feliz es un estigma algo grave aquí y ahora,

pues los huesos heredan conflictivas ataduras,

pero hoy pido disculpas si ofendo narrando

lo hermosa que te siento a vos y tu ternura,

rogando acostumbrarme a la realidad cabeza dura

de hacer de tu cintura una fe que voy adoptando.

Yo solo anhelo caer a diario por tu precipicio,

ser vos contra mí en sociedad ganando guerras,

vencer al tedio elevando al cuadrado tus virtudes

y deseando que mis errores no se hagan vicios,

sabiéndote en mi futuro las guadañas no me aterran,

tus alas y tus manos me rescatan de los aludes.

Jurar que te venero es menospreciar sentimientos,

el engaño que es un espejo del infortunio

sabe que no está autorizado a acompañarnos...

Y el sol en tu garganta, la certeza como viento

dirigiendo omnipotente la magia de este plenilunio

que invita a que nunca dejemos de besarnos...

Ser feliz es casi un hito que sabe incomodar,

no es facil cuando hasta es difícil respirar

hábitos que enseñen a anhelar lo imprescindible,

la delicia de abrigarse de burlas tan cordiales,

pero como resistirse a tejer contra los males

chalecos de caricias leales y creíbles.

Ser feliz molesta a quien parece suponer

que la caída ajena nos logrará fortalecer,

y se asocia con cuervos, lobos y serpientes

besando la anatomía de pesadillas silenciosas;

a todo esto que bendición la historia valerosa

de amarnos sin la estafa de mentiras hirientes.

Ser felices es nuestro secreto difundido,

y perdón por el egoísmo pero quiero asegurar

que si hoy se acaba el mundo es bienvenido,

pues moriremos reflejando nuestra mutua forma de amar.

Mariano